Cuando el viento no se llevó a los Orcos de Mordor

Galadriel - Reina de los Elfos 

Un canal de retransmisión en Estados Unidos elimina de su catálogo "Lo que el viento se llevó" por prejuicios racistas. Por larga, la habría eliminado yo hace tiempo de "mi catálogo". Muy bien que tenga 8 oscars, que sí, que es un peliculón, y en toda la extensión de la palabra. Cuatro horas dura, que con anuncios no la ves entera en dos días.

A Tolkien, una columnista colombiana, le ha acusado de machista y supremacista porque dice que en "El Señor de los Anillos" las mujeres tienen un rol menor y porque no aparecen afroamericanos. En cuanto al rol de las mujeres, o no ha leído el libro o no ha visto la película (ver foto).

Después de aparecer estas noticias, Morgan Freeman, Denzel Washington y Will Smith han decidido quejarse también porque están hartos de interpretar siempre a personajes negros. Jackie Chan, amarillo se ha puesto de ira  por hacer siempre de chino y Anthony Hopkins padece ansiedad desde que, tras su papel de Hannibal Lecter en "El silencio de los corderos", nadie le invita a barbacoas ni a cumpleaños por temor a que se coma a los niños.

Kevin Costner después de "bailando con lobos" no encuentra "una rubia muy legal " que quiera marcarse un chotis y le invite a un "desayuno con diamantes", así que "aterriza como puede" para evitar un "funeral de muerte" mientras "Forrest Gump" se va a la guerra a "salvar al soldado Ryan"  para volver a Alabama y ponerse a correr como un "tonto muy tonto"  "buscando a Nemo" y todo para acabar poniendo un negocio de gambas en Mordor, si es que...

El cocodrilo del Pisuerga

Por si alguien no se había enterado aún, en el río Pisuerga se busca un cocodrilo del Nilo, que no significa que haya llegado desde el río Nilo atravesando las corrientes del Mediterráneo sorteando ferrys, pasando el estrecho y tirar por el Atlántico bordeando Lacosta portuguesa hasta Oporto para coger el Duero todo para arriba y nadar contra corriente hasta el Pisuerga.

No, es todo más fácil.

La historia es que una persona de un pueblo de Valladolid lo tenía como mascota, presuntamente, (los cocodrilos del Nilo son como los de Bilbao, nacen donde les da la gana), y lo ha soltado porque darle de comer a tamaño reptil le estaba saliendo por un pico. Anda que no podía comprarse una tortuga, que para cuando haya crecido te ha enterrado a ti y a tres generaciones más, o un pez de colores como todo el mundo.

Sabemos que lo buscan del SEPRONA y del Grupo de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil, aunque parece que las autoridades sanitarias no tienen mucho interés en que aparezca porque gracias al temor de la gente a salir de casa por fin van a pasar a la fase 3.

También sabemos que no lleva mascarilla pero la ha llevado porque siempre va con la boca abierta, que es una costumbre que estamos cogiendo algunos para respirar mejor.

Veréis cuándo pase la pandemia y volvamos a la normalidad la de mosquitos que nos vamos a tragar.

Lo que llevo peor cuando me pongo la mascarilla es que me faltan orejas. Entre las gomas de sujetar la mascarilla,  las gafas, los cascos...  he tenido que quitarme los pearcing de las orejas, el de la nariz, los de la lengua y un tornillo de rosca chapa que tenía para sujetar una endodoncia porque ya era mucho peso para tan poca cabeza.

Y volviendo al cocodrilo, ya os digo que no lo van a encontrar, se camuflará entre la vegetación de la orilla alimentándose de la fauna del río como los xirulos asesinos y la basura que tira otro tipo de fauna y que se acumula en el fondo cenagoso como latas de mahou, dodotis, mascarillas...

Dentro de unos años el cocodrilo será famoso, más que ahora,  y se le llamará el monstruo del Pisuerga, como nuestro vecino el monstruo de Leganés ¿o era del Lago Ness?