Como la infanta, y yo no sabía nada, oiga, que mi marido es el que lleva las cuentas en casa y 900.000€ tampoco dan para tanto, no entiendo a qué viene tanto escándalo.
¿En qué asesoraba usted a François Fillon, su marido? Bueno, asesorar lo que se dice asesorar, pues mire, ahora que lo dice, yo le decía cómo colocarse la corbata y elegía el color de los zapatos, pero trabajar, lo que se dice trabajar...
Parece que en varios países es normal que a cada ministro se le asigne una cantidad para asesores, no tienen que justificar nada (como aquí lo de las tarjetas black y otras corruptelas). Pueden contratar a sus mujeres, hijos, padres, yernos, primos y demás familia... nepotismo en estado puro (R.I.P. tu familia $no te olvida$) .
Por otro lado, Marine Le Pen también se ha visto salpicada por otro caso de corrupción pero un escándalo tapa otro escándalo, como una pena tapa otra pena.
Algunos se toman la política como un juego, empiezan con el juego de la Oca, se colocan en el tablero y empiezan a tirar el dado. El azar elige el número. Si te sale un cinco vas de oca a oca y tiro porque me toca, vas escalando puestos, vas ganando posiciones, te confías, te pasas al Monopoli, compras, vendes, nada como los negocios inmobiliarios, te pasas a las cartas y juegas al cinquillo, robas, vuelves al tablero de la oca pero puedes caer en el laberinto o en el pozo, ya empiezas a atisbar los abismos... empiezas a quedarte atrapado, estás a tiempo de retirarte ¡qué estrés! También está la cárcel en otra casilla, esa la saltaron con pértiga un número ingente de políticos y poderosos corruptos. Si también caíste en esas redes, ten la dignidad de dimitir, ¡ya está una harta de tanta corrupción, cáspitas!
El dinero, si no se gana honradamente, no da la felicidad.
0 comentarios:
Publicar un comentario