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Carta a Alejandro Sanz

Hola, Alejandro: No me gusta tu música... ni siquiera las letras de tus canciones. La rara debo ser yo, lo siento, no solo por ti que acabas de llevarte un disgusto y probablemente esta noche no duermas por  enterarte de que hay alguien en el planeta que no te sigue, sino por la decepción que se van a llevar algunas de mis amigas cuando lean esto porque van a sentirse "traicionadas".
 Una  de ellas le puso tu nombre a su hijo, el apellido dejó el del marido porque la familia política la amenazó con borrarla del facebook,  por suerte tienes un nombre magno y no te llamas Kevin o Ambrosio (con todos los respetos para los Ambrosios) porque encima el muchacho les ha salido gótico.
No pienses que no entiendo nada de música ( si lo piensas no voy a llorar tampoco) porque algo entiendo pero algunos de los que  vivimos nuestra juventud en los 80 debimos sufrir una  especie de mutación neuronal tras haber escuchado a la vez a Alaska a Modern Talking y a Dire Straits, no sé si lo has has hecho alguna vez pero si lo haces ten cuidado, eso te produce un agapimu que te sulibeya mazo. Si además añades a Camela la mezcla puede ser el mayor arma de destrucción masiva.  Es como ahora con David Gueta, nuestros hijos sabrán mucho de música pero desde luego en ruido ya tienen un master.
Tengo otra amiga que, cuando era pequeña, su abuelo tenía en el pueblo una cabra un poco tiquismiquis, no quería comer, no daba leche... y la pusieron de nombre Margarita por tu canción "La margarita dijo no" Bajo la lluvia y bajo el Sol, la margarita dijo no. Y es que si analizas algunas de las letras de tus canciones (Ah ¿que ha lo has hecho? ¡bien!) son tristes, la música es triste, tú cantas triste, parece que lloras y eso no es bueno, no transmites alegría... que la gente empieza llorando por tus canciones y termina en la calle recogiendo gatos abandonados o en el parque dando de comer a las palomas. ¡Por favor, que alguien le de un abrazo a este hombre!
No estés triste, mira Justin Bieber, se lava el pelo  con champú Johnson de camomila, el del no lores más,  y ahí le tienes, arrasando...
No llores, Alejandro, ven, que mis amigas están deseando darte un par de besos, pero vuelve a España, tu casa es esta, este país te necesita... necesita tus impuestos... ¿Qué es para ti Miami? seguramente lo mismo que para la mayoría de los españoles Torrevieja,  para pasar unos días de verano y ya está, como España ningún sitio (salvo por el paro, la corrupción...) No lo hagas por mi, hazlo por ellas, por mis amigas que son  tus fans. Por mí no hay que preocuparse, sé hacer amigos yo sola...

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Pobre cabra, se de su final y debio ser triste pero en fin "estaba seca" jeje
Ohhhhh de eso nada señorita!!! Como que hace llorar??? A mi me hace llorar de emocion, de amor y de ternura, es un poeta, mi poeta desde los siete años...que primer concierto, en Benalmadena, en el Tivoli ( aun no estaba Julian Muñoz) ainsss ves! Me dan ganas de llorar de recordarlo...jejeje y lloro por Alejandro no por Julian Muñoz....
Fdo: Garbancito :-D

Unica dijo...

Pero que cosas tienes, jaja!!. Pero tienes toda la razón..., que deje de llorar ya,.....hombre!!!. Este no conoce la alegría de cantar. Vaya muermo de tío.

Anónimo dijo...

Te doy toda la razón, es un triste y además sus notas musicales son repetitivas todo suena a lo mismo,como estopa y maná y si encima lo oyes hablar, ni se le entiende! y que deje de comer tanta hamburguesa que está deformado!
bss blanca

Anónimo dijo...

Pues tienes toda la razón, este hombre no sale de su registro melancólico. No recuerdo ninguna canción "marchosa" suya,¡ si hasta el meloso Julio Iglesias las tiene y con ritmo aunque no sepa mover ni un pié!.

merche t dijo...

Siento llevarte la contraria en relación a que debes de ser rara, ya somos dos....Es tan triste como fue este invierno en Galicia. Hace música chicle, pero como bien dices, algunas jovencitas o no tan jovencitas se mueren por un beso o por estar cerca de él....

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